Young Souls

· los brotes ·

La negligencia parental y el abandono, así como largos periodos de institucionalización, han demostrado tener graves consecuencias en el neurodesarrollo. Una de ellas es la dificultad para la planificación, el autocontrol y la dificultad para prever las consecuencias de la propia conducta. Esto, sumado a dificultades emocionales por experiencias traumáticas, lleva a conductas de riesgo como el consumo de drogas, o las conductas delictivas.

El acompañamiento por parte de animales de apoyo, reduce el estrés, ofrece seguridad y mejora la toma de conciencia de experiencias de éxito propias, necesarias para el control interno de la propia conducta. Esto es aplicable también en el caso de jóvenes migrantes, que han tenido que romper sus vínculos de forma abrupta y necesitan crear nuevos, lo que supone un reto para su integración.


A través de la ayuda a animales abandonados, que también sufren las consecuencias de la estigmatización, pueden sentir que contribuyen a mejorar la sociedad en la que viven, generan una imagen positiva de ellos mismos y ayudan a derribar barreras.